UNA CON LA NATURALEZA

   

  La Casa de la Cascada es una obra arquitectónica muy reconocida. Diseñada por Frank Lloyd Wright en 1935. Es considerada un Monumento Histórico de los Estados Unidos, y Patrimonio Mundial de la UNESCO. Ubicada en Pensilvania, lo primero que llama a la vista y lo que le da su nombre es que esta ubicada en una cascada sobre el arroyo Bear Run. Todo desde sus materiales de construcción, su diseño de exterior e interior, y sobre todo su integración con el ambiente que la rodea hacen de esta casa un manjar a la vista.

    La casa se caracteriza por unas terrazas extendidas hacia los lados que pasan por encima de la cascada. Esto ofrece una vista al agua corriendo, al igual que proporciona un sonido relajante. Se utilizó piedra arenisca de la misma localización en algunas paredes exteriores. El concreto reforzado junto con la madera y el acero se utilizó para el resto de la casa, creando una unión armoniosa. Pero lo que más me destaca es el diseño de los paneles de vidrio, que ofrecen una vista panorámica verdaderamente hermosa.

    Su interior tampoco se queda atrás. Además de diseñar la casa, Wright específicamente diseño los muebles que decoran el interior. Estos se integran perfectamente con el interior de la casa, que crea un ambiente acogedor. Las amplias ventanas, además de proveer buena luz natural y circulación del aire, crean una conexión entre el exterior e interior.

    Pero sobre todo, lo que hace esta casa tan especial es su ubicación. La Casa de la Cascada se encuentra dentro del bosque, dándole privacidad, sombra y tranquilidad. El sonido del agua corriendo junto con el de las aves y el viento crea un ambiente de paz. Wright utilizo un diseño orgánico donde la arquitectura y el entorno se integran a la perfección. Utilizando los materiales, las formas y los colores hacen de esta casa una maravilla.

    Definitivamente que se merece sus reconocimientos. La Casa de la Cascada es verdaderamente impresionante. Su integración con la naturaleza es el aspecto que mas me gusta. No por nada Wright es uno de los mejores arquitectos del mundo. Me encantaría poder visitarla algún día.